sábado, 11 de abril de 2009

AUNQUE EL MONO SE VISTA DE SEDA...

Las piruetas electorales del kirchnerismo se suceden:
Cambia la ley electoral propuesta por ellos mismos un tiempo antes, y adelantan las elecciones legislativas. Néstor Kirchner -ex presidente de la nación- es, sin estar en el padrón ni ser bonaerense candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires.
Conspicuos dirigentes de diálogo cotidiano con el poder amenazan a la sociedad con que si pierden se van.
Daniel Scioli se anuncia como candidato a diputado nacional para no asumir nunca, porque seguirá siendo gobernador luego de las elecciones.
Intendentes que serán candidatos a concejal tampoco asumirán nunca porque seguirán en sus puestos.
Cada conejo nuevo que sale de la galera de Néstor Kirchner más que a ese bello animalito se va pareciendo a un esperpento.
Todo es relativamente legal, ¿será legítimo?. Es una defraudación a la voluntad popular antes o después.
Día a día nos alejamos del país normal que anhela la inmensa mayoría de los argentinos.
El fin justifica cualquier medio, y la democracia y la calidad institucional continúan en un plano inclinado descendente.
El kirchnerismo sabe que la elección la tiene perdida porque han perdido el consenso con la sociedad y en vez de modificar sus políticas de gobierno buscan la manera de enmascararse para disimular la derrota.
El Kirchnerismo está agotado, porque nació como proyecto político exclusivamente de poder y el poder en las democracias reside exclusivamente en el consenso de los ciudadanos. No alcanza la chequera, no alcanza el disciplinamiento de sectores políticos y sociales a través de los fondos públicos, la hegemonía conseguida a través del aparato estatal sin acompañamiento de los sectores populares es un elefante con pies de barro. Lo enseña la historia reciente del mundo y de nuestro país.
María Estuardo en la obra de Schiller le pide a Isabel “que se atreva a parecer lo que es”. ¿Es definitivamente el kirchnerismo los intendentes del conurbano bonaerense, Aldo Rico y los gobernadores mas conservadores de Argentina?. No somos ni de izquierda ni de derecha somos el poder podrían decir, fueron el poder podría replicarse. La cuestión es lo que vendrá.
La crisis golpea y la falta de medidas efectivas por parte del gobierno nacional hará que como siempre la paguen los que menos tienen.
Siguen pendientes un ingreso mínimo garantizado para los sectores pobres e indigentes, una reforma tributaria integral para que paguen más los que más tienen y los que más ganan, verdaderas políticas de salud publica, la preservación del empleo, el combate al empleo en negro, el fomento y desarrollo de las pymes y la verdadera justicia con los jubilados.
El 28 de junio recibirá el gobierno nacional un voto contundente de rechazo, se trata que emerja del mismo una verdadera alternativa progresista y no el recambio con “nuevos opositores” oportunistas que fueron parte del pasado más dramático de nuestro país.
Lo importante de la democracia es que en cada elección como lo será el próximo 28 de junio todos valemos igual: “un hombre un voto” escribió Norberto Bobbio. Ante tanto mamarracho institucional, el pueblo tiene la palabra.

sábado, 4 de abril de 2009

UN PRESIDENTE DECENTE
“Los mitos no acuden a la complicidad de nuestra razón, sino a la de nuestros instintos”
André Malraux

La movilización popular que acompaño los restos de Raúl Alfonsín en los tres días de duelo y despedida en el cementerio de la Recoleta, mostraron una adhesión de tristeza y recogimiento de importantes sectores de la ciudadanía inesperada en su magnitud.

Muchos interrogantes se abrieron:¿ cual es el legado de Alfonsín ?, ¿ cual es el balance de su gestión presidencial y de su liderazgo al frente de la Unión Cívica Radical ?, ¿Cuál fue su aporte al proceso de consolidación de la democracia y los derechos humanos ?.

Los griegos expresaban en el claroscuro, en las luces y las sombras, la significación dual de una misma realidad. Quizás con el paso del tiempo, la mirada objetiva de la historia la acerque a esa perspectiva. Alfonsín es el juicio a las juntas militares y las leyes de obediencia de vida y punto final, es el consejo de consolidación de la democracia y el pacto de Olivos, encabezó un gobierno con pocas reformas estructurales en lo económico y lo social que culminó en un proceso de hiperinflación que castigó esencialmente a los sectores populares. Fue un gobierno austero, respetuoso de las leyes y, fundamentalmente un gobierno honesto.

Luego de todo lo vivido en el país en los 25 años de una larga transición democrática la sola condición de dirigente político decente le otorga a Raúl Alfonsín un reconocimiento especial de la ciudadanía.

Alfonsín vivió y murió en el mismo departamento de la calle Santa Fe en la ciudad de Buenos Aires. Después de haber sido concejal, diputado provincial y nacional, senador nacional y presidente de la argentina no se enriqueció con la función pública. Quizás eso y solo eso en la tremenda crisis de legitimidad que tiene la dirigencia política con la sociedad, explique la respuesta espontánea de la ciudadanía ante su muerte.

No abandono nunca Raúl Alfonsín su humildad, su austeridad, su decencia. Contradijo aquello de que “el poder corrompe” porque se alejo siempre conciente “del poder absoluto que corrompe absolutamente”. Se acerco a lo que Andrés Rivera escribió del Gral. Paz en “Ese Manco Paz”: “no quería tierras el manco, y no había oro en tierra argentina que comprase al manco, y no había tributos ni homenajes que corrompiesen su voluntad”.

Simplemente por ser en la historia argentina un presidente decente Raúl Alfonsín es ejemplo para los jóvenes de nuestro país.